De botín del narcotráfico a tierra fértil para campesinos en el Valle del Cauca

25 hectáreas que pertenecieron a alias ‘Don Diego’ ahora son cultivadas por la Asociación Campesina ASCAMPRO gracias a la Reforma Agraria.

Foto: Agencia Nacional de Tierras

La Agencia Nacional de Tierras (ANT), en coordinación con la Sociedad de Activos Especiales (SAE), entregó a campesinos víctimas de la violencia dos predios que en el pasado pertenecieron al narcotraficante Diego León Montoya, alias ‘Don Diego’, antiguo jefe del cartel del Norte del Valle.

Se trata de las fincas ‘El Edén’ y ‘El Tablazo’, que suman 25 hectáreas, ahora en manos de la Asociación Campesina de Trabajadores y Productores del Valle del Cauca, organización que agrupa a más de 80 familias de la región.

En esta primera fase, cinco familias de Tuluá fueron beneficiadas directamente con la recuperación de las tierras, donde proyectan ampliar su producción con cultivos de papaya, cítricos, ají y maíz. Actualmente, la asociación ya trabaja en la transformación de café, incluido café gourmet y especial.

“Estas tierras, que en el pasado estuvieron atadas a economías ilegales, llegan ahora a nuestras manos después de años de espera y lucha. Recibirlas significa un verdadero acto de justicia y reparación, aseguró Lizeth Carolina Moncayo, representante legal de la organización campesina.

Desde la ANT destacaron que la entrega forma parte del proceso de Reforma Agraria. “No venimos a legitimar mafias, venimos a recuperar tierras y devolvérselas al campesinado, porque las tierras del Estado deben estar al servicio del pueblo”, afirmó Carlos Guerrero, abogado de la Dirección de Acceso a Tierras de la entidad.

Los predios habían sido ocupados en 2008 por la Fiscalía y quedaron bajo administración de la SAE tras la extinción de dominio. Durante varios años fueron arrendados para cultivos de caña, guayaba y proyectos acuícolas. Con la finalización de esos contratos en 2024, las tierras pasaron nuevamente a manos del Estado y fueron incorporadas al proceso de redistribución agraria.

Con esta acción, el Gobierno nacional consolida avances en la entrega de tierras a comunidades campesinas. Hace apenas una semana se adjudicaron 10.000 hectáreas en distintas regiones del país, y ahora el Valle del Cauca se suma a este proceso de reparación y dignificación.

Lo que en el pasado fue símbolo del narcotráfico, hoy se convierte en una oportunidad de vida y producción para familias que recuperan su lugar en el campo.